Tempranillo, la uva de los mil vinos

La variedad de uva tinta tempranillo, es la cepa por excelencia, en nuestro país. Se puede considerar que de ella emergen la mayoría de los vinos más representativos de nuestra cultura vinícola. Se la puede considerar como la estrella de las distintas variedades de uva española.

Hay quienes sostienen que los progenitores de esta variedad tinta serían una uva blanca, que se denomina Albillo Mayor o Turruntés y una tinta, situada en Aragón que se la conoce como Benedicto.

Esta variedad de uva, sacramentada como Tempranillo, se la conoce con otros nombres distintos, en las diferentes regiones: En Ribera del Duero se la llama Tinta Fina, Cencibel en La Mancha, Tinta de Toro en Toro, o también Ull de Llebre en Cataluña.

Una de sus cualidades fundamentales es lo bien que se comporta en medios cálidos y con carencia de agua. Tiene una acidez no muy elevada y la gama de matices frutales es variable, dependiendo de su punto de maduración. Como hemos dicho tiene una notable capacidad de adaptación a terrenos y climas muy variados.

Ocupa, según datos oficiales, el 21% del viñedo español (2015) y es la cepa que más fama ha adquirido en la Rioja.

Es una uva austera, que en la Rioja nos seduce por sus matices frutales y florales. Produce vinos finos, amables y sedosos en boca. Estos vinos presentan un color rojo intenso y con matices violáceos en su juventud y aromas a fruta roja madura, frutos silvestres, vainilla, tabaco, chocolate y toques herbáceos y florales.

Los vinos que se producen con la uva tempranillo se pueden consumir jóvenes; no obstante, los de más calidad son aquellos que envejecen en barricas de roble.

Las carnes rojas sin mucho aderezo, el faisán y el pato son buenos acompañantes de los riojas más suaves. También hay quienes proponen consumirlos con el atún o el salmón a la plancha.

Los tempranillos de Rioja suaves combinan muy bien con los quesos de pasta blanda y corteza comible, como el camembert o el brie.

Unva Tempranillo Rioja